Domo, capitulo 2.

 Cuando Taho finalmente identifico la amenaza Una certeza se afianzaba en su mente: la amenaza que se acercaba a la Tierra era algo demasiado familiar, algo vinculado a las maquinarias de su propio hermano, Ramson.

La luz fría de la pantalla delineaba el rostro serio de Taho Mientras el murmullo suave de la ciudad resonaba en la lejanía, la mujer rubia y esbelta se sumergía en un análisis profundo de los datos que flotaban ante ella. Microbots, similares pero no iguales a una creación de Ramson, parecían ser la fuente del peligro para él planeta.

La información fluía como un río de datos ante sus ojos, revelando la presencia de los microbots hacia puntos específicos de la Tierra. La conexión con la red satelital proporcionaba a Taho una visión detallada de la amenaza mientras su mente estrategica calculaba con total exactitud el curso de acción óptimo.

La luz parpadeante de la pantalla mostraba la magnitud del enjambre de microbots que se acercaba, pequeñas partículas tecnológicas que podrían desencadenar el caos. En el fondo de su mente, resonaban las memorias de su hermano intentando acabar con ella. Motivo por el que Taho estaba decidida a utilizar la tecnología de Ramson en su beneficio.

El sol descendía en el horizonte, tiñendo el cielo de tonos cálidos y dorados, mientras Liam Jameson continuaba su caminata por la banqueta. El aroma a asfalto cálido se mezclaba con el perfume de las flores que adornaban los jardines cercanos.

De repente, rompiendo la armonía sonora de la tarde, un automóvil se detuvo frente a Liam. El chirrido de los frenos cortó el aire, un sonido agudo que resonó en sus oídos. El rugido del motor, liberando pequeñas ondas de calor, se sumó al ambiente auditivo.

El brillo metálico del vehículo reflejaba la luz del sol poniente, deslumbrando a Liam por un instante. Al acercarse al automóvil, la sensación de calor proveniente del capó impactó su piel, recordándole la intensidad del día.

La puerta del automóvil se desliza con un suave zumbido. Con cada paso que da Taho al descender del vehículo, el sonido de sus botas sobre el pavimento resuena como un eco firme, marcando un ritmo militar que contrasta con la suavidad de la brisa que ronda.

Al detenerse, Taho observa con ojos azules que escudriñan el entorno con agudeza. El aire vibra con la energía concentrada que emana de la valkiriana.

Liam camina por la calle, perdido en sus pensamientos, cuando su mirada se desvía hacia Taho, quien ha bajado del automóvil.


Taho:hola, Liam.


Liam parpadea, sorprendido, y dirige su mirada hacia los ojos azules de Taho.


Liam: ¿Cómo... cómo sabes quién soy?


Taho: Sé muchas cosas, Liam Jameson. Incluyendo el origen de tus poderes.


Liam frunce el ceño, confundido.


Liam: ¿Cómo puedes saber eso?


Taho:(Manteniedo su expresión imperturbable) Digamos que tengo mis fuentes. Después de todo, estoy al tanto de lo que sucede en este mundo.


Liam se cruza de brazos, intrigado y cauteloso.


Liam:¿Qué es lo que quieres de mí?


Taho:(Con tono serio) Si queremos que este planeta sobreviva, será mejor que me sigas.


Liam duda por un momento, pero la urgencia en la mirada de Taho lo convence de que hay algo más grande en juego.


Liam: ¿Y por qué debería confiar en ti?


Taho:(Comienza a caminar) Liam, hay mucho que no entiendes. Ven conmigo, y te lo explicaré todo. La verdad es mucho más compleja de lo que puedes imaginar.

Minutos después:

Ambos llegan al búnker de Taho, una estructura oculta entre la indefinida franja que separa México y Estados Unidos. Una vez dentro, la oscuridad cede ante la iluminación tenue de luces estratégicamente colocadas. El aire, filtrado y controlado, es puro, aunque deja un ligero regusto metálico en el paladar. Liam inhala profundamente, percibiendo la combinación de aromas que definen el ambiente subterráneo.

A medida que avanzan por los pasillos, el zumbido constante de la maquinaria y la suave vibración en el suelo revelan la presencia de tecnología oculta bajo tierra. Taho, guiando a Liam por el intrincado laberinto del búnker, muestra un conocimiento íntimo del terreno.

Finalmente, alcanzan una sala central donde la luz se intensifica ligeramente, revelando pantallas holográficas y consolas de control.

Taho: Liam, te he elegido porque tus poderes son óptimos para enfrentar esta amenaza. Puedes detener el aluvión de microbots que se dirige hacia la Tierra.

Liam: (Frunciendo el ceño) ¿Detener microbots? Son demasiado pequeños y numerosos. ¿Cómo se supone que puedo hacer eso?

Taho: (Guiándolo) Ven conmigo, ya resolví ese problema.


Ambos avanzan hacia el centro del búnker, donde una silla metálica con un casco en su interior ocupa un lugar destacado.


Liam: ¿Qué es esto?


Taho: (Señalando la silla) Uno de los billones de inventos de Ramson a lo largo de su vida. Este casco puede conectarse a la red satelital y te permitirá identificar la localización de los nuevos invasores.


Liam: (Escéptico) ¿Conectar mi cerebro a la red satelital? ¿Es seguro?


Taho: (Asintiendo) Confía en mí, Liam. Ramson ha perfeccionado esta tecnología. Solo necesito que utilices tus habilidades para atrapar esos microbots una vez que sepas dónde están.

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